Ya estamos en otoño, o eso es al menos los que esta semana quiere darnos a entender el tiempo que nos acompaña. Fresco y algunas gotas de agua, que tanta falta hace, para avisarnos que el verano se acaba.
Esto sin embargo no impide que las terrazas sigan en las calles y que las crónicas lleguen de forma puntual cada viernes. Así que para no romper una tan sana costumbre aquí estamos para probar como saben las tapas de La Esquinita de Juan.
Un bar que se encuentra haciendo esquina con el Paseo del Jardín de la Reina y la calle Albahaca. El local, antes ocupado por Más que Vinos, está cerca de otras alternativas como pueden ser Dikken, La Cabaña del Río, bar Chencho... y destaca por su tranquila terraza y su interior acogedor.
Esto sin embargo no impide que las terrazas sigan en las calles y que las crónicas lleguen de forma puntual cada viernes. Así que para no romper una tan sana costumbre aquí estamos para probar como saben las tapas de La Esquinita de Juan.
Un bar que se encuentra haciendo esquina con el Paseo del Jardín de la Reina y la calle Albahaca. El local, antes ocupado por Más que Vinos, está cerca de otras alternativas como pueden ser Dikken, La Cabaña del Río, bar Chencho... y destaca por su tranquila terraza y su interior acogedor.
Con el fresco que nos acompañaba decidimos probar el interior en lugar de ocupar una mesa en la terraza. Un interior amplio en el que una barra nos da la bienvenida dejando a nuestra derecha un salón con una serie de mesas en las que tapear o probar alguno de los platos de la carta.
La decoración es clásica, con paredes a piedra aderezadas con algunos utensilios que ahora llamarían en dar vintage. Apeos para usos varios que sirven para crear atmósfera.
En la entrada una tele no muy grande, si bien con el volumen al mínimo sirvió para disipar nuestro temor ante la posibilidad de tener el fútbol puesto. Eso además nos sirvió para disfrutar de la excelente colección de canciones que sonaban en el ambiente, a un volumen ideal para entablar una conversación.
Nos sentamos en una de las mesas libres, pues casi toda la gente estaba aún en terraza. No tardaron en atendernos muy amablemente y pedimos de entrada un vino sin alcohol y un tercio de Alhambra Especial. En ese momento nos sirvieron un platito de aceitunas de cortesía (esto se repitió en cada una de las rondas).
La bebida llegó al poco, acompañada de una tapa que no es a elegir. Un plato con dos patatas asadas, rajadas y cubiertas con una salsa a base de mostaza, miel y... bueno, secreto de cocina.
El sabor de la salsa le daba el toque perfecto a la patata. Picaba, pero sólo en su justa medida y era el contrapunto a los tomates cherrys aliñados con sal de escamas. Una tapa ligera pero muy apetecible.
Un momento en el que las mesas que había vacías comenzaron a ocuparse con clientes que llegaban de la terraza. La noche caía y algunos notan el fresco.
Volvimos a pedir una segunda ronda, esta vez con otro tercio y ahora cambiado el "sin". Antes vino y ahora cerveza, la cual parecía ser Cruzcampo de grifo.
La tapa esta vez resultó de lo más curiosa y tal sería nuestra cara que el camarero, tremendamente educado y agradable toda la noche, nos explicó que eran dos espárragos trigueros rebozados en tempura.
Una cama de lechuga y una salsa a base de mostaza y miel de mil flores servía para dar el contrapunto a una tapa que en principio parecían zanahorias. Muy buen sabor y así se lo hicimos saber cuando nos preguntó sobre si había sido de nuestro agrado.
Y en estas estábamos, con la noche ya cerrada y todas las mesas ocupadas, cuando decidimos pedir una tercera y última ronda. Tras las aceitunas, la tapa.
En esta ocasión y para acompañar las dos cervezas sin, dos rulos de queso crujientes con mermelada de frambuesa para dar sabor y sobre patatas pajas.
Buen sabor en conjunto en el que el dulzor de la mermelada servía para entonar el sabor que suele faltarle al queso. No obstante, las patatas eran la nota que más desentonaba del conjunto.
Una tercera ronda (con tres tapas aptas para vegetarianos) tras la que nos dispusimos a abonar nuestra cuenta, que al día siguiente el despertador sino podría pasar factura. En total 12,60 euros que se desglosaban en 2,30 euros por cada tercio y dos euros por el resto de las bebidas, cerveza y vino sin alcohol. En resumen podríamos decir que nos gustó mucho el sitio y seguro que volvemos.
No olvidéis que si queréis estar a la última con opiniones de todos los amigos, recomendaciones, fotos, etc, podéis visitar el grupo en Facebook, así como seguidos en Twitter, Google + y Pinterest o descargar la aplicación oficial para vuestro teléfono Android.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
A la hora de dejar un comentario intenta respetar las normas de ortografía, así como evitar los anónimos, pues no serán publicados
En ningún caso los administradores del blog http://detapeoporgranada.blogspot.com se hacen responsables de los comentarios que aparecen en los artículos.
Asimismo se evitaran las opiniones que usen insultos, términos malsonantes y descalificaciones, así como injurias o amenazas.
Si alguien se siente molestado u ofendido por algún comentario, o bien lo considera inapropiado, que se ponga en contacto a través del mail y se estudiará la retirada de dicho comentario.