La Trastienda

Y tras el paso por el Seco, en la noche teníamos una visita pendiente a un sitio que nos habían recomendado.
Muy cerca, a los pies de La Alhambra, en las faldas del barrio del Realejo... descubrimos La Trastienda...


Ver mapa más grande

Y es que justo enfrente de Plaza Nueva, según salimos de la calle Elvira, o subimos por Reyes Católicos, a nuestra derecha, en la Plaza de Cuchilleros, encontramos este curioso sitio.



Y porque curioso podreis pensar...
Curioso porque de hecho, nada más entrar, nos encontramos con un mostrador, a modo de tienda de embutidos, con una puerta detrás.
Tras quedarnos algo parados, nos dijeron que rodeando el mostrador podríamos pasar...



Llegamos así a una pequeña estancia, con mesas bajitas, una pequeña barra, que no llega a hacer las funciones que todos conocemos, y un ambiente muy acogedor.
Estaba casí lleno, pero tuvimos la suerte de encontrar un hueco... una mesa.



Rapidamente se lleno, y es que el goteo de gente entrando, y haciendo cola para sentarse era increible.
Aún así, el servicio fue rapido y eficaz.
Nos pedimos dos cervezas...
El sitio esta especializado en embutidos, quesos, patés, productos típicos, y como no... vinos para acompañar.
La tapa que nos pusieron fue de dos rodajas de chorizo y pan casero... no muy abundante, pero muy bueno.



Así decidimos pedir algo más... y nos decantamos por una tabla de quesos y pates.
Aunque se tardo un poco en servir, era compresible dado que el sitio estaba lleno.


(Detalle de la entrada)

La gente a nuestro alrededor, tenía vino, y cervezas (salvo algunas fantas o refresco, que no entonaban con el sitio) y veiamos pasar distintos platos.



Aunque las tablas no eran excesivamente variadas, los trozos eran grandes, y al menos, los patés que disfrutamos estaban realmente buenos.


(Pinchad en las fotos para ampliar)

El precio de cada cerveza ha sido de 1,80€, y el de la tabla de 13€... algo más que en otros sitios que hemos visitado, como el Jaraiz o Rossini...
La gente, la clientela era variopinta, pero en general, predominaba un ambiente adulto, y algo bohemio.
Se trata por lo tanto de un sitio muy original, y curioso, que vale la pena al menos conocer y visitar... lleno de tipismo y tradición.
Tengo que decir, que el sitio nos ha sorprendido...